¿ Es la vida una batalla perdida?

<<Cuando tengas mi edad, te darás cuenta que alcanzando los ochenta años entras en una especie de bucle, en una interminable hibernación. Las pasiones desaparecen, pierdes poco a poco el interés por todo, no quieres saber como va el mundo, tienes suficiente con soportar los achaques. Antes, con el ajetreo diario no solía pensar en ello, pero ahora que el insomnio no me deja descansar, cada noche pienso que la vida es una batalla perdida, te rebelas y luchas pero es una batalla perdida y lo sabes, sabes que igual que todos los que te han precedido tarde o temprano serás derrotado y desaparecerás. Cuando eres joven piensas que todo eso le ocurre a otros, que a ti nunca te alcanzará, pero ahora lo veo en el espejo cada mañana, veo en mi reflejo mi propia decadencia.

Jimena se acercó despacio y permaneció en silencio. Ella sabia que había otras formas de envejecer, , Amalia a esa edad seguía cultivando su huerta, la recordaba enfrascada en muchos pequeños proyectos, si cerraba los ojos podía verla caminando ligera, sonriendo risueña, colocando su cosecha de manzanas ilusionada. Definitivamente había otros modos de envejecer, pero también sabía que la salud física había acompañado a su madre prácticamente hasta el final. Amalia pocas veces había visitado médicos, tampoco había estado ingresada en el hospital, La muerte no la habia rozado, quizás por eso Amalia decidió ir ella a su encentro>>

Yo, llamada Jimena.( 3º parte) El mortal tributo.